sábado, 6 de mayo de 2017

Reseña: LA INVASIÓN DE LAS BOLAS PELUDAS, de Luke Rhinehart.


Título: La invasión de las bolas peludas
Autor: Luke Rhinehart
Traducción: María Luz García de la Hoz
Publica: Malpaso
Páginas: 464
Precio: 22 € / 8,99 € (ebook)

¿Por qué la mayoría de las veces pensamos en los extraterrestres como seres que, si llegaran a La Tierra, querrían conquistarnos a toda costa? Porque es lo que el ser humano haría si pudiera alcanzar otro planeta habitado, por supuesto. Pero, ¿y si nos equivocáramos de pleno? ¿Y si los extraterrestres vinieran a enseñarnos algo verdaderamente importante? ¿Y qué podría ser eso? Para saberlo no tienes más que leer La invasión de las bolas peludas, de Luke Rhinehart. Mientras tanto, yo te voy adelantando algo en esta reseña.
Billy Morton es un viejo pescador casado con Carlita, una joven abogada, y padre de dos niños, Lucas, de doce años, y Jimmy, de ocho. Un buen día, Billy sale a pescar con sus empleados en su barco y vuelve a casa con algo que ha salido del mar pero que definitivamente no parece un pez. El extraño ser, una bola peluda saltarina a la que todos llamarán Louie de ahí en adelante, pronto se integra en la familia. No conforme con llevar una vida doméstica familiar, sin embargo, la curiosa bola comienza a usar los ordenadores de la casa con fines que al gobierno de los Estados Unidos no le hacen mucha gracia. Cuando Louie consigue hablar, le explica a Billy que es un alienígena procedente, al igual que las otras bolas peludas que ya están en La Tierra, de un planeta en donde lo único que importa es jugar a todas horas, y que todo lo que están haciendo con las cuentas bancarias, las armas nucleares, etc, no tiene nada que ver con lo que piensan las autoridades. ¿Será cierto? ¿Les ayudará Billy con sus planes? ¿Es posible que toda esta historia acabe bien?
Billy Morton, uno de los narradores principales de esta historia, aunque no el único, es un tipo tranquilo con una vida bastante corriente, lo que no quiere decir que siempre haya sido así. En su juventud estuvo en la guerra, fue hippy y pisó varias comisarías. Probó drogas y todo tipo de relaciones antes de sentar la cabeza. El amor de su vida llegó un poco tarde, cosa que no le importa: Billy es igualmente feliz a su vejez siendo esposo y padre de familia. Pero, ¿qué pasa cuando llega Louie a su vida? Pues que todo se descontrola. Como en su juventud, Billy vuelve a hacer locuras. Y no solo él: ¡también todos los suyos! La bola (la trama, no el alienígena) se va haciendo cada vez más grande, hasta llegar a un final totalmente inesperado y sorprendente que dejará con la boca abierta a más de uno.
Decía antes que Billy está muy presente como protagonista y narrador, pero que hay más narradores y tipos de narraciones distintas. Así, la crónica que Billy hace de su disparatado encuentro con el mundo extraterrestre no solo se ve interrumpido por el informe de Luke, sino también por extractos de la denominada historia oficial y extractos de prensa de lo más variados. La obra, en conjunto, nos da una visión muy ácida, terriblemente sarcástica (tan triste como divertida), de los Estados Unidos de América y del planeta en general. Nos habla, en definitiva, de cómo es Estados Unidos, por qué las políticas que aplican son las que son, quiénes son los que verdaderamente tienen el control de la sociedad, etc, y de cómo van las cosas en el resto del planeta.
¿Y quién es Louie? ¿Qué es lo que pretenden sus saltarines amigos y él mismo? Para descubrirlo, tendrás que leer este libro. Lo único que yo os puedo adelantaros, sin arruinaros la lectura, es que las bolas peludas son unos seres originales y sorprendentes con los que muchos vais a conectar, ¡aunque al final todo lo conviertan en una gran bola!
La invasión de las bolas peludas, en conclusión, es una obra llena de acción, aventuras disparatadas, humor sarcástico y, sobre todo, una fabulosa crítica a la sociedad actual, especialmente a la americana. Este es un libro con el que divertirse, por tanto, pero también con el que reflexionar sobre cómo funciona nuestro mundo, quiénes son realmente los que mueven los hilos y si los ciudadanos de a pie podríamos hacer algo para cambiar las cosas. ¡Una historia única que no deberías perderte, amigo lector!

Cristina Monteoliva